miércoles, 2 de diciembre de 2015

Espíritu de Margot s07e10_Depeche Mode en Zaragoza (2ºparte)



Dejábamos a Depeche Mode en la pista de lanzamiento hacia el éxito. Su LP en directo 101 había sido todo un éxito mundial, quizá uno de los más importantes de la historia. Pero los noventa todavía iban a encumbrar más a los Depeche Mode, que aquella noche de octubre de 1998 llegarían con la historia de su lado, además de con un montón de canciones.


En 1989 comenzó a sonar en las radios el tema Personal Jesus. Iba as er el primer sencillo de Violator, el disco que producido por Flood convertiría a Depeche Mode en uno de los grupos más sofisticados y elegantes de la historia. En Violator además de Personal Jesus también aparecían absolutas maravillas como Enjoy the Silence o Policy of Truth. Depeche Mode se abren a nuevos sonidos y nuevos instrumentos, como la guitarra eléctrica o las baterías reales. 88 conciertos y una banda destrozada por el éxito, las drogas y todos los excesos que uno puede esperar. 

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Hace unos meses me hice con una copia en vinilo del Violator y la verdad que las canciones siguen dejándote enmudecido...parece que como a muchas otras bandas grandes la tensión o las destroza o les azuza la creatividad porque a pesar de todos los problemas que existían en Depeche Mode a principios de los noventa consiguen sacarse de debajo de la manga un disco como Songs of faith and devotion en el año 1993. En plena explosión del grunge Depeche Mode entrega su disco más rockero e incluso blues. Teclados, baterías, coros gospel...I Feel You, Walking in my shoes, In your Room, una colección de canciones mayúsculas. Una gira, el Devotional Tour, de las más extensas de su carrera y en la que los problemas con la heroína de David Gahan hacían todo muy complicado. Hay incluso un disco en directo. La gira se extiende con una segunda manga, Exotic Tour que los lleva hasta mediados de 1994. Nos recuerda un poco, en otra dimensión, a las giras de aquellos años de los Héroes del Silencio, todo era un camino del exceso.


En Junio de 1995 la banda quería comenzar a trabajar en lo que iba a ser su siguiente disco, pero la hospitalización de Gahan debido a una sobredosis y la salida de Alan Wilder de la banda retrasó todo el proceso de trabajo. Hasta 1997 no hubo disco de Depeche Mode, Ultra. Considerado por muchos como un disco de transición y para no forzar la rehabilitación de su vocalista decidieron realizar unas pocas presentaciones para prensa y amigos. A pesar de eso, contiene uno de los últimos clásicos de Depeche Mode, It´s no good.

En 1998 aparece el álbum doble titulado simplemente The singles 86-98, para las que realizaron una gira de presentación en la que incluían como músicos de acompañamiento al baterista austriaco Christian Eigner que ya había participado con ellos en las Ultra Parties, y el teclista Peter Gordeno.


El trío más los dos músicos aparecieron en el escenario del Príncipe Felipe de Zaragoza en octubre de 1998 desgranando clásicos y presencia escénica en la que quizá fue la última gira auténtica de la banda, dedicada a partir de entonces a giras mastodónticas alimenticias en las que se repiten una y otra vez los mismos temas. Depeche Mode, clásicos absolutos, alimentaron de nuevo al público aragonés, deseoso de contemplar a una de las bandas más míticas de la historia reciente de la música, quizá, junto a U2 la última gran banda de la historia.


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