El efecto Lupa (VI Parte): y después, ¿qué?

Para presentar el disco hacen una aparición estelar en el programa de moda por entonces: Lo más plus, en el que los presentadores se ven absolutamente desbordados por la vis cómica, el descaro y la vitalidad de los zaragozanos. Como recuerda Sebas Puente: "Les dieron dos mil vueltas a los tontos del culo de los presentadores. Se quedaron con ellos absolutamente. Intentaron tratarlos como provincianos y como eran un torbellino los destrozaron. Yo pillé el programa por casualidad, pero me pareció muy grande. Sobre todo porque le daban un toque a la ciudad más gamberro, que, creo, le faltaba en ese momento (demasiada épica por aquel entonces)." Esta aparición televisiva lleva el sello del departamento de promoción de RCA que desea que la banda dé un salto cualitativo en lo mediático.

Se realiza el segundo videoclip de la banda, Pon tu mente al sol, dirigido por un habitual en estas lides de la época: Luis Párraga. La grabación aparece, por cierto, en un recopilatorio muy especial: la segunda entrega de Ruido, un vhs donde se recopilan videoclips y entrevistas. Además de la de El Niño Gusano también aparecen Australian Blonde, Los Planetas o Enemigos. Una de las acciones para promover este apoyo fueron los recopilatorios Ruido?, en los que presentaban sus lanzamientos y los de grupos de discográficas más pequeñas.

Sobre el videoclip de Pon tu mente al sol nos habla Javier Aquilué: Las formas de expresión ligadas a la identidad cultural y al folklore siempre me han interesado, y aprecio que la gente sea de donde es. Sin embargo, desconfío de los discursos de escenas locales y generacionales, me parecen cosa del periodismo, la publicidad, la política... Me parecen formas de simplificar. Pero es que en El Efecto Lupa está Buñuel, Segundo de Chomón, Ramón Acín, Francisco de Goya.... Incluso en esa especie de velado "afrancesamiento dandy" (Serge Gainsbourg, Boris Vian, Rimbaud, Baudelaire...) este disco es un hito en la tradición del del underground patrio sí, pero también y aun por encima de eso, en la tradición del arte de vanguardia aragonés (no en términos de territorio, en términos de idiosincrasia). He de confesar que cuando vi el mencionado videoclip de Pon tu Mente al Sol en los 40 principales por primera vez, y me encontré con la basílica del Pilar propulsada a reactor, se me llenaron los ojos de lágrimas de emoción; eso no lo ha conseguido nunca el "Dándolo todo Jota".

Si hablamos de las letras de Sergio Algora en este disco podemos acudir a alguno de los más cercanos en cuanto al entorno literario de Sergio, su amigo el poeta y crítico Jesús Jiménez: Hay en las letras de “Circo Luso” guiños al entorno de Algora: así, detrás de “Mr. Camping” está el propio Pedro Vizcaíno, responsable de Grabaciones en el Mar, quien se jactaba de haber conseguido el muy honorable título de Mr. Camping en el lugar donde veraneaba. Y “El chico de la noria hecha con pelos de colores”, el corte más lisérgico del disco, es simplemente eso: un viaje ácido en lo alto de la atracción de feria. Me demoro escuchando la luminosa “Pon tu mente al sol”. Es una de esas canciones generacionales que aparecen en el pop español cada cinco o diez años. Toda una muy vital declaración de intenciones que tendría su natural prolongación años después en aquel costabravismo, junto a Francisco Nixon. Como ninguna otra de sus canciones, “Pon tu mente al sol” retrata muy fielmente lo que era Sergio Algora: una forma despreocupada de encarar la vida. Es la revisión pop del Carpe Diem horaciano, que en Sergio era más bien Carpe Noctem, claro.

 

Pierre d. La dice: A mí Sergio siempre me ha parecido el poeta más grande de aragón antes y después de su marcha, y por supuesto su saber estar encima debajo o en medio de todo.

Juan Luis Saldaña opina: Pon tu mente al sol es el auténtico himno de la banda. Recuerdo que le cogí cierta manía cuando percibí que gustaba a las pijas como single. ME daba rabia porque el Niño gusano no era eso. El tiempo lo demostró. Sin embargo, la letra de Pon tu mente al sol sigue siendo genial y su melodía también. Me impresiona mucho Pelícano. Creo que el arranque es toda una afirmación de principios y me parece genial. "servía como combustible para cualquier nave" es lo máximo.

 

Sobre ello nos cuenta Javier Aquilué: Las letras del niño Gusano fueron las primeras que leí sesgadamente, infiriendo impresiones y no recabando meros datos en la representación de una historia. Las letras de Sergio Algora -y su conjunción con la música no lo olvidemos- son como recorridos anímicos, son sucesiones de "emblemas", de pistas: como describir una casa no haciendo un recorrido narrativo sino haciéndote experimentar la temperatura de cada habitación, por ejemplo. Para mi como músico en ciernes fue como "bien!! ponerle música al relato cutre de mis cutres experiencias y emociones NO ES LA ÚNICA VÍA!!". Me descubrieron que era posible trasladar sin petulancias la ambición artística a la composición de canciones pop, y que la canción puede ser, como una buena obra de arte, una especie de misterio que el oyente y el compositor comparten, sin que el segundo imponga jerárquicamente su lectura. Sé que no son los únicos en la Historia que lo han intentado... Pero fue ese disco el que a mi me descubrió esos "otros métodos" de "fabulación no-confesional".

Para Patricia Estevan: Esas letras, esas melodías, esas imágenes (el chico de la noria hecha con pelos de colores, un jardín en cada poro, un triste bikini de piel de triste tigre, Mme dos rombos si pela la naranja, cómala) irrumpen en tu mente incluso si no lo estás escuchando atentamente. Eso no me ocurre con ningún otro grupo. Me encanta el hecho de que incluso en los medios tiempos, solo transmite una alegría y una fuerza que supongo se relaciona íntimamente con todas las circunstancias vitales que rodearon las primeras escuchas aunque la fuente es suya, sin duda alguna.

Y David Mayor: Las letras de las canciones son otra cosa, son una celebración constante de la vida, con ese chisporreante humor surreal y esas imágenes tan potentes. Cómo no me iban a impresionar, demostraban un talento y una originalidad fuera de lo original. Aquello era distinto. Sergio tenía un mundo propio y si entrabas en él, salías contaminado. De la mejor contaminación, por supuesto.