viernes, 29 de marzo de 2019

Estuche de lijas de Javier Carnicer en el Cronolector de la Torre de Babel (Aragón Radio)



Introducción

Javier Carnicer, el mito oculto, el poeta maldito que no quiso ser maldito. El hombre que iluminaba con su presencia la noche. Poeta lento y meticuloso. Como otros, poeta antes que músico, músico siempre. Javier Carnicer iluminó la vida de todos los que nos acercamos a él con el único deseo de aprender, tal era su generosidad: un puñado de canciones en maquetas, un libro de poesía experimental inundado y, finalmente, Estuche de Lijas y el disco Lijas posterior junto a Justo Bagüeste, nutritiva herejía en nuestra región.

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En el comienzo fue la palabra:

Javier Carnicer, el mito oculto, el poeta maldito que no quiso ser maldito. El hombre que iluminaba con su presencia la noche. Poeta lento y meticuloso. Como otros, poeta antes que músico, músico siempre, utiliza en su primer libro (una obra corta, solo dos libros), los juegos de palabras, la poesía visual, experimental: Editado en 1982 en Picazo, en Barcelona. "La sombra del obituario vista por su huésped", solo mil ejemplares, como parte de la trayectoria de Carnicer, una inundación en un sótano hace que la mayor parte de los mismos desaparezcan. Recupera algunos. Hace muchos años me regaló un ejemplar. En su presentación en Huesca se montó una exposición-montaje-presentación en la que participó, por ejemplo, el artista oscense Alberto Carrera Blecua. Aquel libro, de componente libre y lúdico, estaba muy influenciado por poetas de corte vanguardista como el tristemente desaparecido José Miguel Ullán. Aquel libro recibió una estupenda crítica por parte del poeta y crítico Ángel Guinda en el Heraldo de Aragón, bajo el título de "El ludiverso de Javier Carnicer" el 14 de Febrero de 1985.
Resultado de imagen de "La sombra del obituario vista por su huésped"
Hay un amor de Ángel Guinda, una retroalimentación de amigo. Lo demostrará con su último texto inédito del que hablaremos más adelante. Carnicer se pone al frente de su siguiente proyecto, una banda de postpunk, de rock trágico. Junto a Felipe Gazo monta en Huesca en 1987 Carnicería Carnicer. . Una banda rock trágico. Los dos eran de Huesca, los dos vivían en Barcelona donde Javier se había licenciado en Filosofía en la Universidad de Barcelona. Gazo tocaba en Orni, otra banda primeriza de la movida oscense de los ochenta. Mayo de 1987. Carnicer tiene melodías, ritmo, estructura de temas, letras. Graba en una cassette su voz y los ritmos e instrumentación a cargo del propio Carnicer con sonidos guturales. Gazo tenía su guitarra, una caja de ritmos, una grabadora de cuatro pistas. Trece temas. Un directo en el que Carnicer toca con la pierna enyesada. Debutan, como no podía ser de otra manera, en Huesca, en las fiestas de San Lorenzo, un llenazo total, un concierto antológico. La intensidad de Carnicer como Frontman es tal que se rompe la pierna en un salto y tiene que ser escayolado al día siguiente, así que queda claro que todo el sufrimiento que emanaban las canciones de Carnicería Carnicer no eran en absoluto fingidas aquella noche. Tuvieron muy buenas críticas y sonaron en programas de Radio 3 como Discópolis y tocaron en Zaragoza en la sala Metro en el mes de Octubre de 1987


La vuelta: el libro Estuche de Lijas

Treinta años viviendo en Barcelona. Un poeta lento y meticulosamente riguroso. No sufre, como otros poetas de la actualidad, como yo mismo lo admito, una incontinencia editorial. Javier es profesor durante años en Barcelona, donde se labra primero una mitología particular basada en la nocturnidad, la nicotina y bandas extrañas como Manicomio Romántico o Soledad Anónima, para luego reposar unos años como docente hasta la vuelta a los versos. Orencio Boix, realizador oscense, miembro del colectivo En vez de nada recoge imágenes inéditas de Carnicería Carnicer. Los chicos de provincias somos así de Orencio Boix. El maestro había vuelto.

Después de La sombra del obituario vista por su huésped, veintiseis años más tarde. Estuche de Lijas/Capsa d´escats. En el año 2008 y en edición bilingüe aparece Estuche de Lijas, catalán y español. Estuche de Lijas, publicado por la Universidad de Barcelona, en el que el concepto del poema como lija para limar el horror de la realidad, un libro alucinado y romántico, de monstruos poseídos, caminantes melancólicos...
Publicado en Barcelona en la primavera de 2008. El título hace referencia al concepto que uno tiene del poema, como lija, como utensilio manual de naturaleza áspera que de otro modo pule las superficies haciéndolas más habitables, más amables al tacto. Las más dura, la realidad, el horror como indiferencia universal, el tacto como sentido común, como una especie de termómetro del daño. El límite viene dado por la chispa, un cohete que avisa del final del poema, diciendo que si uno sigue lijando solo quedan quemaduras, el poema abrasado, el fenómeno se convierte en un solo delirio del autor.
En mayo de 2008 se presenta en la FNAC de Barcelona, lo hace acompañado de los responsables de la traducción y adaptación de los poemas han ido a cargo de Paco Cantero y Eduard Sanahuja (firma el prólogo). Ambos miembros del Aula de Poesía de Barcelona y profesores del Departamento de Dicáctica de la Lengua y Literatura de la Universidad de Barcelona. Animado por poetas amigos como Jordi Virallonga y su musa eterna, su mujer, Karmen. Javier Carnicer presenta su poemario "Estuche de lijas" y recita "Lenguas enfermas". Café del arte, Huesca. 30 de octubre de 2008. Una bella escena el Café del Arte La voz de Carnicer en Huesca, guarda su imagen y su palabra a través de Orencio Boix, amigo y admirador.

El proyecto Lijas (y Polar)

Justo Bagüeste, oscense, vivió la movida madrileña en la parte más tóxica, toca el saxo en los Clónicos, en Rey Lui, es uno de los Chatarreros de Sangre y Cielo de Javier Corcobado y funda IPD y la Ecléctica Madrileña, uno de los sellos más alternativos de la música española dedicado a la experimentación y el ruidismo. Ambos vuelven a coincidir y los ambientes de Bagüeste y la voz quebrada por la nicotina de Carnicer llevan a uno de los discos de spoken word más bellos de la música española y el mejor en la aragonesa. Lijas (año 2008-2009 La Ecléctica Madrileña ‎– EM 009 CD, Nuevos Medios ‎– EM 009 CD) tiene muchas colaboraciones interesantes, Felipe Garzo, aliado tuyo en Carnicería Carnicer, Juanjo Javierre, la gente de Pársec, Frank Rudow (colaborador de Manta Ray), Susana Cáncer, Morti o Corcobado...además de voces en catalán, euskera, alemán o inglés que revisan los poemas de Carnicer.
No hay demasiadas presentaciones: en Huesca, en el Matadero, en la Boca del Lobo en Madrid, en la Ley Seca en Zaragoza y en el Festival de la palabra de Jurançon en Francia. Un directo que mezclaba la poesía con los ambientes y las imágenes de Orencio Boix y que en su visita a Zaragoza nos dejó a todos boquiabiertos.
El poeta continúa recitando sus poemas acompañado por las composiciones musicales de Justo
Bagüeste, ceñidas a la palabra, abrazándola y acariciando cada sílaba. Así que surge al final de 2011 y comienzos de 2012 el EP Polar, de nuevo con Composición, arreglos y grabación de Justo Bagüeste Textos y voz de Javier Carnicer y las colaboraciones de Pelayo Arrizabalaga, Susana Cáncer, Gonzalo
Lasheras, Jesús Alonso y Antonio L. Guillén (Les Rauchen Verboten).

Tuvo una puesta en escena en directo única que pude ver en CC Matadero el viernes 25 de mayo de 2012. Con Gonzalo Lasheras en guitarras y Orencio Boix en las proyecciones. Un momento mágico, el último directo del maestro Javier Carnicer. Aquella semana estuvo en los micrófonos de Comunidad Sonora hablando con Alberto Guardiola y conmigo.


El ángel se despide con amor

En el verano de 2015 fallece Javier Carnicer. Unos pocos meses más tarde y a través de En vez de nada un proyecto imprescindible, necesario Respiraciones (antología inédita) en el año 2016 que recoge las maquetas de Carnicería Carnicer, Manicomio romántico y Soledad Anónima además de temas inéditos de Polar (parte de lo que había sido grado y no publicado en el EP) y una recopilación Buena sangre en el que distintos músicos oscenses creaban ambientes musicales para la voz grabada por Javier Carnicer en sus últimos días. La despedida, el último adiós, un texto inédito, generoso Javier, como siempre, deja para la revista literaria Afiche una revisión de otro libro clave que algún día visitaremos con el cronolector, Vida ávida de Ángel Guinda. Las palabras de otro


Supervivientes al paso entrópico de la humedad. Cuando el maestro Javier Carnicer marchó, descubrimos que todavía nos quedaban demasiadas palabras por escucharle, tantas palabras por decirle. Maldito sueño eterno que es el peor de los descansos. Un corazón plomo que no respeta a nadie. No tocamos a más, no tocamos a nadie.



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