De Vito presentaron el pasado viernes
su primer LP en el escenario de la Ley Seca. Un lugar, la Ley Seca,
que se ha convertido en un par de temporadas en referente de la noche
rockera en Zaragoza por el sonido exquisito, la amabilidad del equipo
dirigido por Patxi y el buen hacer de los programadores, variados y
con buen gusto. En esta ocasión eran los Arcade Producciones los que
contenían en la puerta a las hordas ansiosas de dance punk con
denominación de origen aragonesa. Fuxedo en voz y máquinas (y
alguna guitarra), EdSullivan en solista y ruidos, Pablo Malatesta en
bajo, distorsión, sintetizador y mandolina más Ferdinard, la
máquina del ritmo electrónico, son una maquinaria perfectamente
engrasada de baile y variopinta ametralladora de eslóganes
postmodernos. Alaridos controlados, dicción alterada, poliglosia
letrística en la personalidad arrolladora de Fuxedo, siempre
manejando el tiempo y las ejecuciones sumarias, EdSullivan, seis
cuerdas festivas y con un punto siempre imaginativo, ambos punteados
por la sección rítmica, donde un Malatesta elegantísimo aporta la
contundencia básica para el salto cualitativo entre el tecnobakala y
el pop industrial. El Gran Norte, el tema con el que abrieron el
concierto, es una composición mágica, que engancha en su gelidez
para contraponerse con On fire, otro acierto en la máquina de hits
que son los De Vito. No faltaron clásicos en el repertorio como
Buenas noches Beirut o Clap your hands and say co...tampoco el
sentido homenaje a Sergio Algora desde el ritmo de psicótica cumbia
que es Champán para todos, un par de versiones...guiños a los
noventa con el Debaser de los Pixies y el final con la versión de
Niños del Brasil...De Vito tocan Viernes con la música de Al oeste
y no pasa nada...porque son grandes, maduros, guapos y geniales. Que
continúe el baile y usted que lo vea.
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