La nueva entrega de Hotel Margot estuvo dedicada al poeta y compositor Gabriel Sopeña.
Podéis descargar desde aquí el programa en Aragón Radio.
Y aquí el guión al completo de la pieza.
Hoy
abrimos las puertas de nuestro Hotel para recorrer la trayectoria
vital y artística de uno de los más grandes creadores de nuestra
región, el poeta y compositor Gabriel Sopeña. Nacido en Zaragoza,
su presencia ha sido referente en las letras y la música de nuestra
tierra desde comienzos de los años ochenta hasta la actualidad: el
verano de 2019 presentó en Logroño, dentro de Agosto clandestino,
su libro ‘Antología de canciones, 1983-2000’ editado por los
riojanos 4 de agosto. Muchas serán las habitaciones que abriremos en
esta ocasión: Ferrobós, El Frente, Mas Birras, Loquillo, Luis
Alberto de Cuenca, Gil de Biedma, Ángel Guinda...palabras y música.
Bienvenidos al Hotel Margot, bienvenidos a su estancia junto a
Gabriel Sopeña
Nos
situamos en la Zaragoza de comienzos de los ochenta. Gabriel Sopeña
vive en el barrio de Casablanca y toca la guitarra junto a su amigo
Mauricio Aznar para soportar los largos estíos zaragozanos. Sueñan
con Bob Dylan y Jack Kerouac junto al Canal Imperial de Aragón.
Eléctricas y acústicas, armónicas, voces, todo junto. Es el año
1979 y Sopeña monta su primera banda, Ferrobós. Formada por Jesús
Trasobares (guitarra y segunda voz), Eduardo Jimeno (bajo), Sergio
García (batería) y el propio Sopeña (guitarra y voz). Se presentan
en 1982 al I Primer Concurso de Rock Ciudad de Zaragoza y ganan el
primer premio ex aequo con Doctor Simón y los Enfermos mentales. La
actuación en el desaparecido Rincón de Goya resulta un poco
accidentada. Tomates incluidos para el cantante. En 1984 forman parte
de la I Muestra de pop y rock y otros rollos, mítico punto de inicio
de la modernidad musical en Aragón. Ferrobós tienen un sonido
contunidente, herederos del mejor Springsteen y las bandas del nuevo
rock americano. Plastifican su primer material en el año 1987, en el
recopilatorio Monegros y también en el seminal Sangre Española,
disco que toma el nombre el mítico programa presentado por Cachi en
el canal 2 de Radio Zaragoza y en el que comparten surcos con Mas
Birras, Proscritos, Furtivos y las Lágrimas de Mermelada de Jesús
López. Allí aparece ya Si hay una guerra, Me das un minuto y la que
quizá es su canción más conocida, Resaca.
El
primer y único LP apareció en el año 1988 Círculo de Fuego,
grabado por el Sello Interferencias en el año 1988. Poco tiempo
después, Jesús Trasobares y Gabriel Sopeña disuelven la banda y
emprenden nuevos caminos. Pero antes de eso volvemos unos años
antes, volvemos a Mauricio Aznar, compañero de correrías y hermano
en la vida de Sopeña. Mauricio forma Golden Zippers en 1981 y ya en
los primeros singles de la banda, que practica un rockabilly de
manual muy en la onda de Straycats o la movida de Barcelona, colabora
Gabriel Sopeña. Pero cuando Mauricio decide ampliar horizones
musicales y formar Mas Birras, pasando a la voz solista, Gabriel lo
acompaña en la sombra, colaborando en la composición, en las voces
y la armónica en directo y acudiendo al rescate en algún momento
difícil posterior. Además de Sangre Española, los Mas Birras
también graban temas en Los chicos de provincias somos así en 1986
y su primer EP, Al este del Moncayo en 1987 editado por el sello
Interferencias: los temas Esa Chica Llamada Soledad u !Oh, Ana! Son
compuestos en parte por Sopeña. En esas sesiones de grabación
también se registra El próximo eres tú, con Sopeña en la voz
solista. La aparición del tema en discos y recopilaciones, las fotos
de la banda...siguen siendo sucesos con un halo de polémica. Pero
nosotros estamos en Hotel Margot para disfrutar de la música. Y otro
de los grandes temas del dúo Aznar&Sopeña, quizá el más
famoso es este Apuesta por el rock and roll
En
1988 aparece Otra ronda de Mas Birras donde Sopaña adapta el
Summertime Blues de Eddie Cochran (una constante en su obra posterior
que le ha proporcionado alguna de sus canciones más conocidas),
escribe Isabel y colabora en la composición de temas como Vuelta
atrás o No voy a ningún sitio. Aunque el tema que dejará huella en
ese disco es la adaptación del poema de José Luis Rodríguez
García, Cass, que se convertirá en una canción mítica del
repertorio de los Mas Birras y de Sopeña en solitario, además de
conocer múltiples versiones de otros grupos y solistas. Más
adelante escucharemos alguna de esas versiones. Seguimos ahora con el
nuevo proyecto de Gabriel, El Frente. La banda busca un sonido
clásico con letras cuidadas, dando espacio a la pasión de Sopeña
cor los cantautores eléctricos. El Frente
El
Frente es la continuación natural de Ferrobos, un Sopeña mucho más
maduro, jugando con la lírica beat inspirada por el Eclesiastés,
los metales y los violines que habían aparecido tímidamente en
Ferrobos, encuentran su sitio natural bajo la batuta de un Sopeña
mucho más confiado en sus posibilidades como compositor, arreglista
y productor. Los dos discos publicados bajo el nombre de El Frente
son puro Sopeña, un tipo que canta, toca la guitarra y compone con
las ideas muy claras. Aparece en el año 1991 Otro lugar bajo el sol
y al año siguiente Barcos. Las canciones pelean por entrar en las
radiofórmulas e incluso temas como Un corazón como tú llega a la
lista de los 40 principales. Recuperamos para este Hotel Margot una
sentida versión desnuda de Un corazón como tú . Se trata de un
concierto del año 1991 en la zaragozana sala Interferencias, donde
grandes compositores e intérpretes de la época (Jorge Reverendo,
Mauricio Aznar, Chema Fernández, Josu García, Iñaki de Green
Apples o Froncho que estaba entonces en el Bosque y ahora tiene un
nuevo proyecto Bandada Marina) tocan versiones y temas propios en un
formato desnudo.
Prosigue
la colaboración con Mas Birras a principios de los años noventa.
Los Birras han fichado por Pasión, un sello madrileño, en la
búsqueda de un salto cualitativo. En la Última traición, con
Mauricio Aznar en la portada, han abandonado el purismo rockista para
dar espacio a otras propuestas cercanas al rock latino o el folklore
americano en toda su acepción. En aquel disco hay dos temas
compuestos íntegramente por Sopeña como Perla Criolla y La
telaraña, acompañando a Maurico en Sinsentido y la bellísima Hay
una cruz en el Saso o en la adaptación de Besos dulces como la miel
(de la banda The Weavers, donde estuvo Pete Seeger). La historia de
Mas Birras en Madrid y la búsqueda del éxito tiene muchos
clarososcuros, sobre todo por la situación emocional y física de
Mauricio Aznar. Sus problemas para componer y cantar en tiempo y
forma hacen que para el segundo y último disco con Pasión el resto
de la banda tenga que echar mano de Sopeña en lo que podríamos
considerar casi una operación rescate para el disco Tierra quemada,
publicado en el año olímpico de 1992 y con producción de Tony Luz,
ex de los Pekenikes y que había producido a los Rebeldes y a los
Trogloditas. En la banda, por cierto, había entrado Josu García, un
camino que continuará en paralelo, el de Josu y Sopeña hata la
actualidad. El poso de Sopeña se nota, es el disco más intelectual
y compacto de la banda: Promesas rotas, Loreto, Carne de Tren, Blues
del hijo de dios o Para llegar a ti llevan en mayor o menor medida el
sello de Sopeña:
Llegamos
a un momento muy importante en la trayectoria de Sopeña como
compositor, un punto de inflexión en su carrera: Altoaguirre,
productor de El Frente lo es también de Loquillo y Trogloditas. En
aquella época la banda de Barcelona está pasando un momento
convulso, la salida-expulsión de su guitarrista y compositor Sabino
Méndez ha dejado a Loquillo sin el hombre que lo había acompañado
hasta el estrellato durante los años ochenta. Altoaguirre decide
pasarle a Loquillo una cinta, una demo con algunos temas inéditos de
Sopeña. El Loco elige uno de ellos, Brillar y Brillar que se
convierte en un hit de la banda. Son los años de Hombres y aunque lo
hemos conocido en la voz del rockero del Clot, vamos a escuchar esta
versión original, la demo de Sopeña de Brillar y Brillar.
Sopeña
en Hombres y, sobre todo, Mientras Respiremos, nutre a la banda de
canciones, consiguiendo, además, con esas composiciones, un salto
cualitativo en lo referente a la madurez de los Lps. En Tiempos
asesinos aporta la magnífica Ciudad muerta y Compañeros de viaje,
Loquillo canta Un fogonazo y Armando al amor en distintas bandas
sonoras y caras B, la adaptación de El Hombre de Negro de Johny Cash
se convierte en un éxito instantáneo que ensombrece otras
adaptaciones magníficas que Sopeña ha realizado, como el No more
heroes de los Strangles, Me and Bobby McGee de Kriss Kristofferson o
Cocaine de Jackson Browne o Spanish Bombs de The Clash para la voz de
Loquillo. Además es habitual en los discos de transición entre
Sabino y el final de los Trogloditas que Sopeña ponga música a los
textos de Loquillo en varios temas en cada LP. Pero no solo de rock
vive el hombre, también de poesía. El final del Frente ha dejado a
Sopeña con tiempo para dedicarse a otros proyectos, aparece su
primer libro de poemas, La noche del Becerro en 1992 editado por
Olifante y además acompaña en el viraje estilístico a Loquillo con
la publicación de la Vida por delante en 1995, el primer disco de
poetas. La vida por delante, un verso extraído del poema No volveré
a ser joven de Gil de Biedma, incluye poeas de José Mateos, Antonio
Gamoneda (bastante años antes de que le diera el Premio Nacional de
Literatura) o de Cesare Pavese. También un texto extraído del
poemario La noche del Becerro, Lisboa. Escuchamos la versión de
Sopeña en un directo en Sos del Rey Católico, en el entorno del
Festival Luna Lunera. Lisboa en la voz de Gabriel Sopeña
Aquel
disco de poetas fue un éxito sorpresivo. Una gira nacional,
actuaciones en televisión, quizá es el primer reconocimiento
artístico de Gabriel Sopeña fuera de las fronteras de nuestra
región. Aunque de nuevo, como pasó con Mas Birras, el poeta
permanece en la sobra. La vida por delante es un disco de Sopeña en
el que Loquillo se limita a poner su voz a los textos musicados por
Sopeña, que se encarga de la producción, los arreglos y la
dirección musical de un puñado de instrumentistas de altísimo
nivel. El éxito hace que tras años más tarde el proyecto encuentre
continuación en Con elegancia, editado por Picap. Con elegancia
tiene un sonido más rockero, con adaptaciones de Jacques Brel,
Vazquez Montalbán y Luis Alberto de Cuenca (detalle este importante
para el futuro), entre otros. Otra maravilla, tanto si a uno le gusta
el rock como si le gusta la poesía. Una insuficiente campaña
promocional y una discográfica demasiado orientada al mercado
cataloparlante hacen que el éxito no se repita, con problemas de
distribución incluidos que hacen del disco una rareza hasta su
reedición unos años después. Incluye maravillas como esta
adaptación de La aurora de nueva york de Federico García Lorca, con
las voces de Loquillo y la invitada de Luis Eduardo Aute.
Picap
es la discográfica que publica Con elegancia de Loquillo, pero
también es la responsable de la edición del primer disco en
solitario propiamente dicho de Gabriel Sopeña. Mil kilómetros de
sueños aparece en 1998 y resulta un disco ligeramente fallido.
Promoción no adecuada (el mismo problema que tuvo el disco de
poetas), presiones para que Gabriel vuelva a grabar sus canciones más
conocidas con su voz (John Milner para Loquillo, Cass y Apuesta por
el rockandroll de Mas Birras) dejando de lado los temas nuevos. De
todos modos estas versiones no son simples copias de las originales,
la incontinencia y voracidad de Sopeña lo llevan, en compañía de
un puñado de músicos de primer nivel, de la escuela jazz rock de
Barcelona (Jordi Pegenaute a la guitarra es un ejemplo...) a revisar
los arreglos y la perspectiva de aquellos temas, dándoles un barniz
completamente nuevo. De todas maneras también se incluyen una serie
de canciones completamente inéditas, compuestas por Sopeña en los
últimos años, que tanto melódica como líricamente rayan a la
altura de cualquiera de los clásicos incluidos en el disco. Uno de
esos clásicos que se ha mantenido en el repertorio de directo de
Gabriel es este Armando al amor.
Con
el final del siglo Sopeña entra en una espiral creativa
completamente distinta, prodigándose poco en directo, entregando de
manera regular canciones para Loquillo, produciendo a bandas como La
Ley, Los Reverendos, El Bosque, pero sobre todo decicando tiempo a
distintos proyectos corales en el que aporta composición y
producción dejando textos y voces a distintos artistas seleccionados
por él: en
el año 1995 compone el disco-libro Universo en Ciernes sobre poemas
de Mari Pau Domínguez y que cuenta con voces invitadas tan
importantes como Miguel Ríos, Mauricio Aznar o Loquillo. En el 98
pone música a poetas latinoamericanas y españolas en el disco
Orillas, textos de Magdalena Lasala, Alfonsina Storni o Gabriela
Mistral. Las voces que lo acompañan son las de Ludmila Mercerón,
Elena Rubio, María José Hernández y Carmen París. Además de para
Loquillo hace canciones para María Creuza o María del Mar Bonet,
damas de la canción contemporánea, toca en Nueva York, compone para
el musical de Juana de Arco, también un libreto para José Sanchis
Sinisterra, Misiles melódicos. Colabora con Dos Lunas, participa en
los discos tributo a Elvis Presley y Jackson Browne y poco a poco
comenzamos a verlo un poco más en directo, acompañando a la CAB
(compañía aragonesa de Bluegrass) revisando el repertorio de Mas
Birras o en conciertos benéficos. Pero el comienzo de siglo trae la
noticia más triste, la muerte de su amigo y hermano Mauricio Aznar.
Las canciones que habían vuelto a escribir juntos, los poemas de
Mauricio...Zaragoza, Aragón está de luto, Sopeña había perdido a
su hermano.
No
es la única pérdida vital en el entorno de Gabriel, Guillermo
Martín, un mito a la guitarra de nuestra historia musical, fallece
en 2006. Hemos escuchado el directo Hermanos de sangre, con el que se
despedían los Trogloditas y en el que Sopeña está presente en las
voces junto a la guitarra de Guillermo. Con el comienzo de esta
década parece que la promesa del nuevo disco de Sopeña en solitario
está más cercano a convertirse en una realidad. En 2008 aparece
Balmoral, el primer disco en solitario de Loquillo, con la impronta
de Sopeña en el tema Cruzando el paraíso que Loquillo graba a dúo
con Johny Hallyday o por supuesto hermanos de sangre o La vida es de
los que arriesgan, con texto del poeta Juan Mari Montes, una pieza
que tendrá largo recorrido en la carrera de Sopeña. Vuelve en 2011
a la actividad poética con Máquina fósil, editado por Olifante y
ese mismo año y después de un largo tiempo de adaptación de los
poemas a canciones aparece el tercer disco de poetas en la voz de
Loquillo. Su nombre era el de todas las mujeres. Este disco será
distinto a los dos anteriores: para empezar está dedicado únicamente
a un escritor, Luis Alberto de Cuenca y por otro lado la producción
y arreglos del mismo corren a cargo de la, por entonces, mano derecha
de Loquillo, Jaime Stinus. El resultado es, como poco, irregular. La
producción no se ajusta al tono de las letras y Stinus abusa de
elementos no orgánicos. Las maquetas que graba Sopeña son un
reflejo mucho más fiel de lo que podría haber sido un disco
histórico que se quedó en un disco simplemente notable. Así que
hoy, en Hotel Margot, escucharemos la materia prima de la que estaba
hecho aquel sueño.
La
década sigue avanzando y Sopeña sigue trabajando en canciones y
canciones, maquetas y más maquetas, puliendo un repertorio que
parece inagotable y que aparece en pequeñas gotas, tanto en directo:
concierto en el patio de la Infanta de Zaragoza en 2010, en la sala
Oasis en un concierto pro-Haití, abriendo para Loquillo en marzo de
2012...en 2014 aparece un disco de Olga y los Ministriles, Es a veces
amar, compuesto por Sopeña sobre 11 poemas de autores aragoneses,
como Ángel Guinda, Antón Castro o el desaparecido Antonio Pérez
Morte. Ese mismo año adapta el Spanish Bombs de The Clash para ser
interpretado por Loquillo en su disco en directo El Creyente, grabado
en Granada, un directo en el que ya aparece a la guitarra Josu
García, aquel joven muchacho que había sido parte fundamental de la
última época de Mas Birras. Josu entre en la banda de Loquillo como
guitarra y en los discos siguientes ejercerá también la producción,
cosa que se notará sobre todo en el magnífico Viento
del este donde
gracias a la conexión artística y emocional entre Josu y Gabriel
las canciones que aporta Sopeña al disco vuelven al lugar que se
merecen. Por ejemplo este Las ventajas de perderte
En
el año 2017 por fin aparece el segundo disco en solitario de Gabriel
Sopeña. Sangre Sierra. Producido como hemos comentado por Josu
García y con colaboraciones como las de Enrique Bunbury, Ramón
Arroyo de los Secretos o Loquillo, el disco mezcla clásicos de
siempre (Cass, Apuesta por el rockandroll, «Yo y Bobby McGee») con
canciones solo conocidas por maquetas o directos e incluso alguna
compuesta en los meses previos a la grabación del disco. “Veinte
años junto a la frontera esperando que floreciera la sangre entre
los muros y ahora el Mago ha vuelto y trae una pluma en su sombrero.
Sangre Sierra es un disco magnífico, denso como un alcohol que se
degusta despacio, de semántica exigente y regusto clásico:
guitarras crujientes, órganos que rumian bajo el pellizco del
desierto y ese violín que siempre nos devuelve a los romances
perdidos en Durango. Gabriel Sopeña: delineante de mapas imposibles
plenos de ternura pero también de desarraigo”.
Sopeña
monta una banda para la grabación y directo en la que hay nombres
como Jorge Gascón, Roberto Montañéz, Guillermo Mata o Laurent
Castagnet, más gente como El Niño Bruno o Begoña Larrañaga,
mítico acordeón de los Problemas de Enrique Urquijo. El concierto
en las Armas de Zaragoza en junio de 2017 sirve para presentar el
disco y el repertorio incluye clásicos y temas recientes, momentos
de toda su trayectoria, un auténtico festín para sus seguidores. El
mejor Sopeña, el más maduro ha vuelto. La síntesis de toda una
vida en un puñado de canciones.
Después
del final de su programa de televisión Canal Saturno sigue con
distintos proyectos en mente, además de ser profesor de Historia
Antigua en la Universidad de Zaragoza y vicedecano de la misma en lo
referente a asuntos culturales. Sopeña ha presentado recientemente
un libro con sus canciones, prepara un nuevo disco de poemas para
Loquillo, en este caso dedicado a Julio Martínez Mesanza , en el
último disco de canciones de Loquillo es parte de la nómina de
compositores junto a Leiva, Santi Balmes de Love of Lesbian o Marc
Ros de Sidonie. Seguro que cuando abramos las puertas de este Hotel
Margot ya nos habremos quedado atrasados siguiendo la carrera
creativa de Sopeña, un chico de Casablanca que jugaba con su amigo
Mauricio a ser cantores de la vida. Un verdadero placer este Hotel
Margot dedicado a Gabriel Sopeña, espero que lo hayan disfrutado.